Si algo es cierto, el humano desde que es concebido empieza una carrera para destacarse, donde el diferencial, grande o pequeño es vital para la sobrevivencia, en el ámbito empresarial el deseo de marcar la diferencia y ser pioneros en el mercado es el mayor anhelo de cualquier compañía, ahora, si hablamos del área de tecnología el tema se agudiza, ya que el avance de la tecnología es tan efímero que en un minuto vemos un producto con grandes capacidades y beneficios, parpadeamos y ya existe algo mínimo dos veces mejor, de esa manera la innovación aparece para generar cambios substanciales que le permitan a las empresas tomar el liderato y posicionarse en los consumidores.
La innovación no es más que encadenar una serie de falencias presentes en el mercado que apalancan y dan rienda suelta a un motor de ideas que permiten de manera ingeniosa - y principalmente práctica - solventar los problemas que existen de tal forma que el cliente se identifica rápido y las adopte de tal manera que sienta como si esa solución saliera directa de sus pensamientos, y no sólo se conforma con eso, la experiencia sobre la novedad es casi como si hubiese nacido usando el nuevo destello de genialidad.
A pesar de que para el ser humano el encontrar los errores en las cosas de los demás es sumamente sencillo y obvio, para la innovación se requiere un talento adicional al de sólo criticar, muchas de las grandes innovaciones cuando son puestas en el mercado, la mayoría de nosotros nos cuestionamos: " ¿ y porqué a mi no se me ocurrió algo tan obvio ?", la respuesta es sencilla, es obvio, pero la innovación es un arte que va más allá de "lo obvio", es esa capacidad de tomar un problema, analizarlo en todos los aspectos y buscar la usabilidad más acorde para que cualquier persona pueda llegar a con tan sólo observarla intuitivamente saber que hacer con la nueva "solución".
La innovación y el éxito de la misma también depende de factores externos, como, la disponibilidad de talento humano, el acceso a la información, los requerimientos técnicos, el apoyo al desarrollo de innovación en empresa pequeña, mediana y grande de manera equitativa, la cultura, la protección y la benevolencia del gobierno con el emprendimiento, la investigación y el desarrollo.
En estos últimos puntos es donde encontramos las principales falencias que se encuentran en el momento en que se piensa en generar una innovación, para aterrizar las ideas, que mejor que las cifras:
- El índice de innovación global, liderado por Suiza, Chile y Panamá y en el cual Colombia aparece en la posición número 68 y teniendo en cuenta que perdimos 8 posiciones, referentes al año anterior.
- Por otra parte, los índices de Colombia Emprende, en el aspecto de Capital humano, Colombia ocupa la posición 19 en el escalafón global, pero en Latinoamérica lidera en la posición 1. – o sea, ganas nos sobran -, en cuanto al aspecto de Facilidades de financiamiento, Colombia ocupa la posición 38 a nivel global y a nivel regional la posición 9 – Muchas ganas, pero poco apoyo -, el índice de inversión, ciencia y tecnología a nivel global ocupamos la posición 46 y a nivel regional la posición 7 – Recursos si hay, pero en las manos equivocadas, donde hacer por cumplir es más importante – y por último en el aspecto Sistema educativo que motive la creación de negocios, ocupamos a nivel global la posición 35 y a nivel regional la 4 – Muchas ganas, pero poco enfoque - .
- En cuanto a las formas en que se da el emprendimiento en Colombia, el 50% se da en medio de la informalidad, es decir, por cada 10 iniciativas, 5 se dan faltando a la normatividad – algo hay que revisar -.
- El capital promedio que necesita un Colombiano para iniciar un negocio es de 27.1 millones de pesos.
- El Ministerio de las TIC genera un programa llamado Apps.co –del cual participé- en el cual según sus cifras al llegar a las 1.000 ideas apoyadas durante 2 años, SOLO 100 tienen éxito, en el ámbito académico de las 50 mil personas capacitadas a ese momento 18 mil se certificaron, estos indicadores se logran con una inversión de 30 mil millones de pesos.
Volviendo al panorama inicial, el generar una innovación que no solo saque adelante una familia, sino sea el motor de ingresos y desarrollo de un país o una región, es la responsabilidad y el fomento que el gobierno puede y debe crear para proteger su patrimonio, la creación de leyes que beneficien financiera y tributariamente a iniciativas “pequeñas” – porque ahora, nada es pequeño, hoy alguien hace una aplicación, se posiciona en meses y está por encima en facturación de empresas "grandes" tradicionales – para que, no solo el hecho de generar empresa sea el hacer el registro en cámara de comercio y se pague impuestos, sino que se lleve un proceso en el que se protejan iniciativas realmente innovadoras, esas requieren de un estado y una cultura ciudadana que entiende de procesos y fundamentos, y no, de resultados sin peso alguno.
En un entorno donde los peces deben correr maratones para ganar, los factores importantes para alcanzar los objetivos, se fundamentan en los intangibles, la perseverancia, disciplina y el valor para afrontar los obstáculos necesarios para llegar a tener un producto que nos espera en la meta e iniciar la carrera de la supervivencia junto a la competencia y las grandes marcas que absorben el mercado y permanecen en el tiempo.
Para tener un avance firme y constante es importante tener:
- Un plan de trabajo que contemple eventualidades.
- Un equipo de trabajo responsable y apasionado.
- Referenciar el competidor y aprender a aprender de él.
- Tener un modelo de negocio y procesos.
- Disminuir dependencias humanas.
- Contar con excelentes proveedores que le den respaldo.
- Coworking y Networking.
- Un blog o página donde publicar avances.
Dentro de una compañía "solvente", la innovación jamás debe hacerse a un lado, el correcto proceder debe ser la destinación de un porcentaje de los recursos exclusivamente para el desarrollo de nuevas soluciones que no solo les genere un ingreso adicional, sino también les genere a sus usuarios una mejor experiencia en sus productos y mayores beneficios, la relación cliente - empresa es lo que marca la pauta en el crecimiento de la compañía.
La gestión de la innovación debe ir más allá de salir a hacer encuestas a los clientes, si es cierto, un gran porcentaje de las mejoras o nuevas funcionalidades son resultado de escuchar al cliente, no es sano, quedarse a esperar que el usuario nos diga las cosas, trabajar en generar nuevos conceptos es más valioso para la experiencia del clientes, el factor sorpresa tiene mayor impacto en el mercado y en la perspectiva de los consumidores es algo que genera una cultura de saber que siempre hay algo mejor e ingenioso, un ejemplo de esto es la hegemonía que ha tenido en sus lanzamientos Apple, una compañía donde sus usuarios esperan con ansias el lanzamiento de sus productos para ver las genialidades con las que vendrán sus productos, a pesar de que hace varios años Apple ha ido presentando menos innovación, sus fieles usuarios siguen creyendo en que lo que saque la "manzana" es lo tecnología de punta, ganarse ese renombre no se da en meses, pero si no hubiesen empezado hace unas décadas, en este momento sus ventas y respeto en el mercado no sería el mismo.
Julian Dario Luna Patiño - "JudLup"
Domoteco S.A.S
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